A finales de agosto del año 357 se enfrentaron en las cercanías de la ciudad romana de Argentoratum (Estrasburgo) dos ejércitos. Uno formado por una coalición de nobles germanos y el otro un ejército romano, dirigido por un príncipe de la familia imperial, el futuro emperador Juliano, llamado el Apóstata. Pese a carecer casi por completo de experiencia militar y a que sus tropas se vieron ampliamente superadas en número, Juliano consiguió una rotunda victoria sobre sus enemigos, que contribuyó a estabilizar el sistema defensivo romano en el norte de la Galia.

Por Borja Pelegero, ponente ya habitual y apreciado en nuestras jornadas que en años anteriores impartió las conferencias La panoplia mongol y El KV2 de Raisenai.

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INFORMACIÓN PRÁCTICA

Sábado 22 de octubre, a las 18 horas

Cotxeres de Sants, carrer de Sants 79, Metro Plaça de Sants (Barcelona)

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